El seguro obligatorio de tu automóvil (el más habitual seguro para autos), da cobertura a los daños que el conductor del vehículo puede originar a otras personas o vehículos, en caso de producirse un accidente y que este sea culpable. Quedando fuera de dicha protección los daños que pueda sufrir la persona asegurada, así como cualquier daño material que haya sufrido el propio coche asegurado.
Este tipo de seguro, solo aporta las coberturas básicas para poder desplazarte en coche de acuerdo a la legislación española.
Como es normal, este tipo de seguro no nos va a dar muchísimas coberturas, pero como ya hemos dicho, si las necesitas. El seguro a terceros como es conocido también, es el más sencillo y por ende el más económico. Con lo que si tú tienes un accidente con tu vehículo, y seas el culpable del mismo, tu compañía se hará cargo exclusivamente de los daños tanto personales como materiales que sufran las personas de los otros coches implicados.
Por lo tanto cubrirá:
- Los posibles daños generados al coche del otro conductor implicado en el accidente.
- Los daños personales generados a las personas de los otros vehículos.
- Cualquier daño ocasionado a los pasajeros que vayan con el conductor asegurado en el coche.
- Cualquier tipo de daño causado a los peatones
- Cualquier deterioro causado a materiales generados por el accidente.
Aunque dejé otro tipo de coberturas fuera, este seguro es obligatorio para poder circular, aunque solo sea una vez, o lo tengas aparcado en el garaje. Con lo que debes de tener claro, que si tienes un coche en el garaje estacionado, y no piensas moverlo nunca, también tienes obligación de tenerlo asegurado, aunque solo sea por la cobertura mínima de responsabilidad civil. Se entiende que un vehículo tiene que estar asegurado para la ley española:
- En caso de tener matrícula española
- No está matriculado, pero lleva una placa que indica que está expedido en España.
- El usuario habitual del vehículo tiene domicilio en España.
Tener un coche sin seguro, conlleva una sanción, dependiendo del tipo del vehículo, la gravedad de cualquier problema generado por él y la posible reincidencia, puede alcanzar cifras de hasta 3000 euros, además de dejar el coche inmovilizado
Al igual que comentamos las coberturas que tiene, debemos de recordar que no incluye los daños que hayas podido sufrir tu como conductor o tu propio vehículo. Aunque sí que es cierto, que es un tipo de seguro que permite añadir otro tipo de coberturas, y así poder cubrir algunos aspectos que de dejar el seguro como es. Las más comunes suelen ser la cobertura de daños al conductor, la rotura parcial o total de lunas, el robo por el vehículo o poder contar con un coche de sustitución si fuera necesario.
Debemos de tener claro, que un seguro a terceros es simple pero también el importe que se paga por éste es el más bajo de todos los tipos de seguros, en el caso que queramos hacer cualquier tipo de ampliación, no hace falta ni mencionar que irá de la mano de una subida del precio a la hora de contratarlo. Pero ahí debes de ser tú quien sopese que necesidades tienes y que estas dispuesto a pagar.
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