Si hay un tipo de pelo con movimiento, naturalidad y con un sinfín de posibilidades, es el pelo rizado. Es cierto, que muchas personas nos dicen que no es sencillo tener una bonita melena y sobre todo tenerla sana, cuando su pelo es rizado, porque conlleva una serie de cuidados muy específicos, y para eso, lo más necesario es conocer qué tipo de rizo tenemos, y cómo es nuestro pelo, para poder atenderlo o darlo que necesita.
Cuando hablamos de pelo rizado, hablamos de un pelo que sale de lo liso, pero hay fundamentalmente tres tipos.
Comenzamos hablando del pelo ondulado, del rizo que más gente tiene. En este caso hablamos de un pelo que no es precisamente ensortijado, se encuentra a medio camino entre el pelo liso y un pelo rizado. A nosotras nos parece que es un tipo de pelo ideal para una melena midi, que dará frescura, desenfado y volumen a esta largura. Dentro de este tipo de pelo podemos encontrar desde pelo muy fino y que le cuesta coger volumen, al que pierde definición con facilidad y se encrespa en la zona de la raíz, al que se riza desde la raíz y es más grueso. Para cada uno deberíamos de pensar cuál es el producto que mejor le va, con el que mejor se define el rizo y con el que más dura.
Después, podríamos diferenciar el tipo de rizo con tirabuzones bien definidos, que es suave al tacto, aunque pueda parecer que no, pero que sufre con la humedad, o se encrespa con facilidad. Al igual que en los ondulados, podemos encontrar varios subtipos: el que tiene rizos elásticos y definidos, pero que pierden la definición de forma rápida, los hay también con mucho volumen y con una densidad y grosor importante, pero que tienen menos brillo, parecen menos hidratados. Y los que son auténticas espirales, que se encrespan con mucha facilidad, pero que tiene un gran volumen y es bastante grueso.
Y el pelo afro. Su forma es peculiar, y su textura es incluso áspera. Parece esponjoso, pero al tacto es en muchos casos áspero, con apariencia de desorden y con un volumen muy importante. Son cabellos que normalmente si queremos que estén definidos y con un buen aspecto hay que dar un extra de hidratación, si no es imposible domarlos o que tenga una apariencia incluso saludable. En este tipo de cabellos, podemos encontrarlo con una cabellera frágil y con menos protección natural que el resto de los rizos. También encontramos un pelo que resulta áspero y que su textura varía mucho de grueso a fino, y encontramos un tipo de rizo que es indomable, que es quebradizo y que no tiene definición.
Hay que buscar como hemos dicho que productos son los que mejor le van a cada cabello, en función de la hidratación que necesite o de lo quebradizo que sea. Siempre huyendo de productos que resequen más el pelo, que normalmente es lo que puede producir que el cabello se encrespe más y parezca mucho desaliñado.
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