La novela de Tommaso Scarlatti se cuenta a través de los ojos de «Rito», un soldado que se une al ejército a la edad de trece años. Un joven Vitelloni es elegido para el papel y una joven pareja que se une a su nuevo comandante es brutalmente asesinada. La historia de la historia es una especie de trágica historia de amor con una resaca emocional y un giro en el comportamiento de algunos de los personajes. Vitelloni es un cuento clásico de la resistencia italiana. Liberado del servicio militar, un joven se convierte en una figura destacada del movimiento antifascista «Libre-Italiano».
La película sigue las desventuras de una pareja de jóvenes borrachos que intentan robar y robar en el restaurante local mientras están en desacuerdo con el hotel, que les permite usar el baño. Es un drama oscuro y claustrofóbico, una historia de amor en ciernes. Pero las audaces elecciones de Fellini revelan la esencia misma del director y de su temática italoamericana. *** 14. Vitelloni (1971) Dirigido por Luca Vittorio Si la carrera de Fellini hubiera terminado a los veinte años, esta es la película que lo habría hecho famoso.
La película cuenta la historia de un pequeño pueblo llamado San Siro, un pequeño pueblo de sólo 300 habitantes, hogar de una pequeña pero potente secta religiosa conocida como el Vitessehe. Después de que un hombre local llamado Antonio, un sacerdote, fue asesinado por los miembros de Vitessehe, el hijo de Antonio, Antonio Vitelloni, encabeza una rebelión contra la organización liderada por su padre, y se desplaza a través del territorio más peligroso de Sudamérica, los Andes, una isla que lleva el sello de una remota aldea de montaña, llena de los animales tipo buitre que Vitelloni decía en la leyenda que habían matado a su padre años antes.
Hijo de una institutriz, un anciano sin hijos llega a Roma con tres hermanos menores. Son los únicos miembros de la familia que sobreviven a la muerte de su padre en su granja (la historia se basa vagamente en la vida del difunto y gran padre Lombard). Las historias de los niños y sus desventuras abundan mientras la historia es contada en flashback, puntuada por una inquietante toma del cementerio de la granja, una figura vestida de ocre de pie sobre las tumbas de todos los ahogados, el sonido de una voz triste. La historia, o más bien su lenguaje visual, es tan potente.